21 Noviembre 2018

En Chihuahua no nos vamos supeditar a un ando militar: Javier Corral

El gobernador de Chihuahua Javier Corral Jurado, refirió que prefiere la colaboración de la Policía Federal que la intervención de lo que será la Guardia Nacional propuesta por el presidente electo Andrés Manuel López Obrador, la cual podría representar la institucionalización de las fuerzas armadas en tareas de seguridad pública.

Luego de que el próximo gobierno de Andrés Manuel López Obrador, plantea a poner a los superdelegdos como los coordinadores en materia de seguridad, así como la imposición de mandos militares para que respondan directamente a la SEDENA en tareas de combate a la delincuencia común, el mandatario estatal afirmó que si pretenden desplazar a los gobernadores, tendrán que asumir las consecuencias.

Expresó que no concibe, solución al problema de la inseguridad, sin la concurrencia de la autoridad local, pues son ellos quienes conocen de la situación en cada región.

“Aquí por ejemplo en Chihuahua no nos vamos supeditar a un ando militar. Chihuahua no se va a someter a ningún mando militar”, sentenció.

Corral Jurado refirió que más allá de las críticas que ha hecho hacia la federación, no son los policías ni sus mandos los que han fallado o escatimado esfuerzos en materia de colaboración, sino el mismo régimen corrupto que ha ejercido presión política sobre los cuerpos de seguridad.

Añadió que si existe quejas o deficiencias dentro de la Policía Federal debe corregirse a través de una depuración y capacitación, pero no por ello dejar de reconocer su eficacia en el combate al crimen organizado.

“Nosotros, si nos dan a escoger, preferimos a la Policía Federal varias veces, unos cuantos bribones no definen a una corporación esencial para el combate a la delincuencia organizada como es la policía federal, y lo dice alguien que se ha quejado varias veces de la falta de colaboración del gobierno federal, pero sabemos que no está en los policías ni en sus mandos siquiera la determinación de colaborar con nosotros”.

El jefe del ejecutivo subrayó que sustituir a esta corporación por la Guardia Nacional resulta preocupante pues existe el riesgo de que las fuerzas castrenses dejen de ser un apoyo para los gobierno estatales y la misma federación en materia de seguridad pública y se conviertan en quienes lleven la batuta en esta materia, dejando el combate a la delincuencia organizada en manos del secretario de la Defensa.

Aseveró que esto ya se lo ha comentado a López Obrador y, aunque no ha recibido aún una respuesta, espera una reunión pronta con el resto de los gobernadores para discutir este tema pues hay muchas divergencias y dudas, sobre todo por la posible violación a la soberanía de las entidades federativas, el atropello a las autoridades locales y el abandono a los proyectos de fortalecimiento para policías municipales y estatales.

“Lo que sí hay que advertir en esta hora crucial del país, en esto que ellos mismos han llamado la crisis de seguridad y violencia en México es que quienes asumen todas las decisiones y todo el control en la conducción, deberán asumir también toda la responsabilidad, y si al final se pretende desplazar al gobernador y autoridades locales en esa estrategia pues tendrán que asumir las consecuencias de desplazar a un componente fundamental, no concibo que haya solución al problema de al seguridad sin la concurrencia de la autoridad local”